viernes, 20 de marzo de 2020

Corona versus, como lo pasa un rico Capitulo 7


Corona versus, como lo pasa un rico                                                    Capitulo 7

El  séptimo día:

Buenas tarde noche , no sé si ayer me pase un poco, hoy ya me han insultado por decir lo que opino , parece que alguno se ve descrito en algunos de mis escritos diarios , pues hoy levantare ampollas, ¿Por qué? , lo digo, hay muchos hipócritas que están adoptando perros , para pasearlo por la calle y así salir del domicilio con impunidad, lo que no se es porque los refugios los dan sin más , que pasara con estos perros cuando termine el encierro , tiraran el perro a la calle o lo devolverán a los refugios caninos , como siempre por culpa de estos veremos cómo sacan la prohibición de salir los perros de las casas, entonces  estos hipócritas , abandonaran  a los perros porque ya no les sirven para su fin , el tiempo nos lo dirá…
Otro dato es que ya por fin algún político catalán deja a la UME instalar un hospital de campaña en Barcelona capital, llega la coherencia  esperemos que sí.
A estos que forman fiestas privadas en ciertas naves o locales, espero que también les entre la coherencia.-
Yo esta mañana me he levantado un poco más pronto que otros días, al llegar la camarera con el desayuno , creo que por primera vez en mi vida le he dado las gracias y le he sonreído, ella también me ha sonreído, cada día me parece más guapa , es que lo es , no me había fijado en ella tanto como ahora, nooo , por dios que me pasa , el encierro me está atacando  seguro, me he bajado al salón , he descubierto una puerta que he preguntado  quien la había puesto ahí, el cocinero me contesta , siempre ha estado  ahí, coño, voy abrirla , abra señor , yo le enseño a donde va , abriendo la puerta he descubierto un nuevo mundo , desde cuando yo en mi casa tenía un spa, un comedor con barbacoa en el sótano de la casa, otro garaje más grande que el de la entrada , cuando tenía otro ala de la casa , con habitaciones para visitas y lavandería , ofris ,cocina , cámaras de cocina enormes y una vino teca de más de 200 metros , claro está es que yo vivía en un espacio mínimo de la casa, habitación, salón ,despacho y cuarto de baño ,el resto era del servicio, veo que no ha que hay detrás de esa otra puerta, el trastero señor , me lo puede abrir,  claro señor , en ese momento las telarañas se me quedaron en mi cabello y en mis manos , que pasa que esto no se limpia , pues no señor aquí solo hay trastos viejos , trastos viejos  que dice este cocinero , será porque los españoles somos de naturaleza orgullosa, y de lo nuestro ni hablamos o no  fue capaz el Quijote de perder la vergüenza por su Dulcinea y hacer verdaderas tontadas en sus salidas por la Dulcinea del toboso.  
Es que en las  familias de clases medias de este país, siempre hay un miembro (Miembra), estos o estás que pisan fuerte por la calle con un postureo que quita el hipo al que lo ve, cuando su ser lo demuestra en cosas tan simples  como cuando llamar al timbre del portero automático y se le pregunta ¿Quién eres? O ¿Quién llama? Y te contesta YO… o eso de “abre que soy yo” eso debe ser una clave secreta, ya que todo el mundo abre, sigue sin saber quién es, pero abre y cuando llama a la puerta de la casa, el que abre, o la que abre dice,”a si eres tú, no sabía a quién he abierto”, pero lo grabe es que da igual la hora, da igual quien seas, da igual, si dices "Yo" te abren.  Lo malo es cuando contestas ¿Quién es yo? Oye en ese momento se ofenden y  se cabrean porque dudas de quien es, en ese momento te llaman de nuevo  y te contesta diciendo pues ¿Quién quieres que sea yo? Con un orgullo desmedido y  ofendido por lo bajines y volviéndose al que circula por la calle, que le importa un pepino tu odisea, según abres dices "¿quién cojones va a ser? pues yo",  y el viandante se dice a vale eres tú… y, pero tú lo has dicho, por tu ego. Pues eso mismo he sentido yo cuando me ha contestado, no se limpia porque son trastos viejos… es mi pasado cada cosa que está dentro es un recuerdo, le dije al cocinero déjame, que eche un vistazo.
En cierta medida envidio a los que en sus viviendas esos muebles del siglo pasado y no los míos todos modernos , como los García-flores , unos amigos que tenía como vecinos en el apartamento que tenia junto a otros estudiantes en mesón de paredes  (Madrid)  hubo un momento  que les envidiaba por su tango ventajoso con respecto a mí,  cada vez que me acostaba en mi cuarto de estudiante veía por la ventana esos muebles de época recargado que daba a la casa un  grado de notoriedad , también me acuerdo de su hija  Paula , bueno en concreto de las bragas  que ponían en la cuerda de tender justo encima de mi ventana , las noches de juventud , durmiendo con la fantasía de ver a mi vecina con esas íntimas prendas de deseo y lujuria de los años ochenta , su balanceo configurando un columpio  de  la poca tela y encaje  difícil de sujetar en aquella ordinaria cuerda, sueño y fantasía de aquel joven pos adolescente , cada noche me decía , está es la última vez mañana subo y le dijo  que estoy loco por su hija Paula que por favor con absoluta naturalidad , que por favor ponga bien la pinza en el tendedero que estoy harto de que sus braguitas y tangas  terminan muchas veces en el quicio de mi ventana , que es tanta la  frecuencia se que se cae se que  perteneciente a la niña y que parece como si ella no se diera cuenta de esta circunstancia, ella me contestó con aplomo que es cierto, que no se había dado cuenta , mejor me quedo quieto y eso es lo que hice me gusta esta fantasía, fantasías que fueron subiendo de tono , hasta que un día  Paula sabiendo que estaba solo , sin compañeros de estudios en el piso , bajo a pedirme unas braguitas que se habían caído ,  llamó a puerta  y dejo escapar una mirada muy pícara con unos ojazos increíbles ,con  labios carnosos , con su pelo al aire y su naricilla pícara  y bien formada , con una blusa rosa ,dejando entrever ese canalillo de pechos redondos , una vez pasó y le di sus braguitas, rompió y ciñó el ceño , se volvió y me cerró la puerta en las narices , yo estaba a mas de cien y solo me quedo ir al cuarto de baño , y pensando en ella , “cascármela como un mono”.
A qué viene este recuerdo, me está pasando factura el encierro, por dios el sexo, siempre el sexo, el Homo erectus, siempre pensando en lo mismo. “Viva el Machismo” que grosería he dicho para estos días  en que el feminismo gana la carrera al machismo .-
Bueno otro día  que bajé al trastero a ver qué recuerdos me traen esos muebles y juguetes que están en el más de los olvidos, pero ya no recordaré a Paula, no la volví a ver y no sé si la recuerdo así como la he descrito o me la he figurado de otra forma, bueno ya cenando, me dirigí a mis aposentos y a pasar la noche de este séptimo día.
Toni Alvarranz  19-03-2020


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