Sin duda, gracias al desarrollo de la tecnología y un buen
uso del Internet, la manera en cómo nos acercamos o estamos en contacto con
nuestros familiares y amigos, es cada vez más corta. Ya no necesitamos gastar
cantidades de dinero para hacer una llamada telefónica a otro país para
comunicarnos, o incluso, ubicar a un amigo en el extranjero, ya que nos
podemos comunicar vía Skype, nos escribimos y compartimos fotografías en
Facebook, nos enviamos emails, etc.
Esto una pequeña historia sobre dos viejos amigos que se
reúnen después de muchos años, nada más y nada menos que cuarenta y cinco años,
que no se veían y no escuchaban su voz, la verdad si se ven por la calle
serian dos desconocidos, pero vivieron una niñez muy juntos, los dos
realizaban labores de pastoreo en San Fernando, junto con Antolín,
que era el encargado del cuidado de las ovejas y encargado del ordeño,
con el cual pasaban el día entero.
Gracias a un conocido que fue también alumno de San
Fernando, aunque con algún año menos, pero que también compartió las vicisitudes en Sanfer y conociendo a ambos por diversas causas, les facilito el
reencuentro en un día soleado de noviembre de este año. ¡Sé que te conmoverá,
como me conmovió a mi dicho encuentro!
Al recoger a Manuel ,
en la puerta de su casa , salimos a la carretera y en su mirada se
observaba incertidumbre , nervios y creo que miedo a encontrarse con su
pasado , hablaba sin parar , recitaba nombres como una metralleta que soltaba balas , D. Agapito , D. Crescencio,
D. Juan Ajenjo, Sor Pilar, Sor Ana , Sor Elvira Etc.
Me contaba cómo D. Fernando
le digo que hiciera la maleta cuando tenía diecisiete años y él se temía lo peor ir a León o Santander u
incluso a Asturias como los demás compañeros
que salieron en ese año 1968 con un futuro incierto pero se encapricho
de él una familia que vivía en Colmenar Viejo, dio gracias por que se fijaran en él y le cogieran para trabajar en la panadería
que regentaban ,pues estaba cerca donde se
crio , pero aquella alegría se convirtió en pena , trabajaba de las once
de la noche a las ocho de la mañana
haciendo pan cargando sacos hasta de
cien Kilos, me comenta , gracias
a que por donde tenía que pasar era un pasillo largo pero estrecho y podía descansar apoyado a dichas paredes para
aliviar dicho peso, después a repartir ,
poco le quedaba para descansar, además me comenta ,¡no me pagaron un duro
mientras estuve allí! , solo comida mucho pan.
Después de estar con dicha familia al reclamarles un
salario, ya era mayor y tenía mis necesidades , me dieron a una familia de ganaderos del mismo pueblo
,posteriormente ante la falta de
recursos y no pudiéndole pagar , me
buscaron mediante un tratante de ganado
que recorría las distintas ganaderías un trabajo y este me llevo
a Camarma de Esteruelas a la finca “El
colegio” donde estuvo veintiún años , al
quedarse este sin ganadería y poco salario que le daban, se marcho a la finca
sita en Alcalá de Henares ,donde
trabajo de tractorista y empleado para todo llamada “la Rinconada”,
luego medio engañado, pues tuvo que tratar con toros de lidia se le contrato en
la finca de “El Mirador” del pueblo de
Ribatejada provincia de Madrid , una vez vendida esta por no reunir
requisitos se traslada a la población Torrijos (Toledo) también con
toros bravos y por último trabajo en la finca “La Dhesa” de Galápagos
(Guadalajara) donde se Jubilo, ya había
trabajado bastantes desde Abril del 1952
.
Durante el Viaje Pensaba en su hermano Ramón (El Vicio) por
la lectura del Marca (Periódico de Deportes) que cada lunes solicitaba a los
Salesianos que llegaban al Colegio de San Fernando, que le hubiera gustado
venir en esta visita al pasado.
Recogimos primero a José Antonio compañero y amigo mío de la
niñez , en Fuencarral y a Miguel en la caseta de la “Ciudad Escolar” ,insistido
por este pasamos a su interior y nos
dirigimos hacia la cafetería , se miraban pero no se hablaban , recelaban , miguel
me miraba, Manuel lo mismo , en dicho
momento rompí el hielo, Miguel sabes quién es , el contesto que no , Manuel se
le quedo fijo mirándolo a los ojos y le dijo
soy Manuel el Hermano de
Ramón (El Vicio), la sonrisa apareció en
sus caras , coño tu eres Manuel dijo Miguel
, claro contesto el otro, que estuviste
con las ovejas conmigo, si , que alegría , ya no pararon de hablar de sus
recuerdos mientras tomábamos café
sentados en el bar.
Después nos dirigimos a S
an Fernando, Manuel abría los ojos
ante las vallas quedan entrada por la entrada
a la policía Municipal y a lo que queda de San Fernando. Para ellos es como si desde el principio se
hubiesen sentido en casa, como si este festival hubiese sido el
reencuentro de unos nuevos viejos amigos, no pararon
de caminar, a cada paso, una
anécdota, un comentario, también una tristeza de cómo lo conoció y en lo que se
ha convertido San Fernando, pero con
alegría de ver las piedras que le vieron
crecer, también recordó con amargura como lo abandono, con su amigo Miguel paso la mañana en un minuto , a la hora de partir de nuevo a casa
, no querían despedirse, me hicieron parar el coche y aparcar de nuevo , tanto que siendo las 15:30 horas , nos fuimos a comer a
la cafetería de sanfer, el café y la copa se alargo hasta la noche , los dos al despedirse tardaron todavía unos treinta minutos ,no querían apartarse el
uno del otro, querían seguir hablando de su niñez y adolescencia , quedando en
verse en casa de Manolo en breve.
Hoy se me ha presentado en casa, esta tarde, a darme las
gracias, de lo emocionado que llego a su
domicilio, se le olvido despedirse, era tarde y su mujer le esperaba mirando por el balcón, me dijo que nunca se
le olvidaría este día En San Fernando y
lo bien que se lo paso, los recuerdos que recupero y dando las gracias por el
buen recibimiento de Miguel de mi
compañía y la de José Antonio recordando su niñez y los rincones de San
Fernando.
Antonio Álvarez 1961