jueves, 11 de agosto de 2016

Verdad o leyenda, Historia del “Cañón Tigre y Nelson”

 Verdad O leyenda, Historia  del  “Cañón Tigre y Nelson”

El “Cañón Tigre” es una de las históricas armas defensivas más importantes de la historia de España. Esta pieza de artillería es mundialmente famosa por la épica jornada del 25 de julio de 1797 en la ciudad de Santa cruz de Tenerife (Islas Canarias, España). Ese día el almirante inglés Horatio Nelson.se disponía a invadir la ciudad y el archipiélago, pero un cañonazo de esta pieza le arrancó un brazo y le hundió su flota.
El cañón fundido en bronce en Sevilla en el año 1768, tiene 13,3 cm de calibre por 279 cm de longitud de ánima, o sea de los llamados de a 16. El cascabel es esférico y tiene varias hojas de adorno, el fogón está abierto en la misma pieza, rodeado de una roseta floreada en relieve. En el primer cuerpo lleva un escudo de cuatro cuarteles con las armas de Castilla y León y la leyenda “Carolus III D. G. LBS-PAN. ET IND. REX”. En el segundo cuerpo, los muñones y asas que representan delfines. El muñón derecho tiene la inscripción: 44 QQS 62 LIBS (2053 kg) y en el izquierdo: COBs. AFINs. ILIGs. (Cobres afinados y ligados). En la faja de separación del segundo y tercer cuerpo tiene una cenefa con varios adornos en relieve. En el tercer cuerpo la divisa VIOLA TI FULMINA REGÍS (Rayos del Rey ofendido) más arriba, en filacteria el nombre de la pieza, “EL TIGRE” y cerrando el brocal otra cenefa con iguales adornos. Está perfectamente conservado y en condiciones de hacer fuego.
Pero al parecer la historia verdadera  no fue así por lo que se produce una nueva leyenda urbanas , el cañón "Tigre" y el brazo de Nelson, pero parece que los especialistas de aquella gesta o no lo leyeron, o quieren seguir engañándonos con sus falsas interpretaciones, o no han leído nunca los centenares de libros que se han publicado sobre el lord vizconde Horacio Nelson , otra verdad al parecer es que  la batalla contra el comodoro H. Nelson cuando vino a Canarias en 1797 a capturar un barco, del que le habían informado mal, había llegado de Manila cargado de joyas, mantones y dineros robados por los españoles a la población de Filipinas, un cañón que se ha hecho famoso en la mentalidad de algunos patrioteros, pero que no tuvo que ver nada con el famoso brazo de Nelson, de donde se sacan los españoles y asimilados el viejo cuento de que al gran almirante inglés y que  un cañón español de 134 mm, le quitó el brazo en Tenerife, porque si Nelson hubiese recibido un cañonazo en el brazo en el momento de desembarcar, la bala del cañón se hubiera llevado el brazo, a Nelson, a la lancha y todos los que iban en la misma, porque una bola de dicho cañón eran enorme .
Reconociendo el heroísmo de las Milicias Canarias y cuantos participaron en la batalla, pero el informe del cirujano que atendió a Nelson en los primeros momentos siendo cirujano del buque "Theseus" se llamaba Mr. Thomas Eshelby  constando en el libro de a bordo del buque donde servía ,  dice así “retiró un trozo de bala de mosquetón que le había fracturado el brazo por encima del codo y cortado una arteria a Nelson se tuvo que amputar” y no una bala de cañón o metralla, según consta en el diario de a bordo de dicho buque, también dice dicho diario  que “el doctor quiso embalsamar el brazo para llevarlo a Londres”, también dice que “ el almirante dijo que no, que lo tirasen al agua para que yaciese allí con los marinos que habían sucumbido en el combate”.
Desde esta posición  pasaremos a los estudiosos canarios interesados, tras la derrota en Cuba y Filipinas en 1898, años después ya en el siglo XIX, es cuando se empezó a fabricar esta leyenda, en lo que se instauraba como una nueva colonia Española y que en sus días  se habla de independencia entre la gente seria como solución para acabar con la ocupación española de Canarias.
Fue un teniente artillero español el que derrotó a Nelson y después la poca prensa escrita  de Tenerife de la época se saco de la manga su nombre de oficial, nombre que lo dicen incluso en las charlas con los amigos, los nostálgicos del imperio español, pero fueron precisamente marinos franceses del buque "La Mutine", que combatieron en la noche del 24 de julio junto con los defensores del castillo de San Carlos, los que tiraron con sus mosquetes, y una bala gala, por casualidad, le rompió el codo a Nelson, esto del cañón "Tigre" fue como la batalla de la Victoria de Acentejo”, batalla que nunca existió sino en la mente de un monje español de la época, Espinosa, molesto por la enorme derrota que sufrieron los españoles en el barranco de Acentejo en 1494.
"En una palabra, la expedición de Nelson fue uno de aquellos hechos cuya merecida desgracia no es solo hija de la injusticia misma de la acción, sino también de lo imprevisto y atropellado de ella".
Hay que reconocer también que los ingleses fueron para canarias en aquella fecha porque tenían noticias de la llegada de un buque español cargado de oro y riquezas de Manila, que Nelson  como buen Pirata , Bucanero Inglés quería para enriquecerse , porque si Nelson hubiera venido a conquistar Canarias habría traído una flota de desembarco, con la caballería y todo lo necesario para ocupar Tenerife, mientras otra parte de la flota atacaba el puerto de La Orotava, que estaban indefenso, esto no quita el  no olvidar el valor de los que combatieron en aquella gesta los soldados Canarios , pero creemos que el Cabildo tinerfeño también debería gastarse su dinero en hacer reconstrucciones patrióticas como la de la batalla de Acentejo, donde los guanches derrotaron completamente a las tropas españolas del bandolero y traficante de esclavos Alonso Fernández de Lugo, arrancándole el pendón Español que herbolaban y no de una invasión que como tal no sucedio.
Otros historiadores dicen:
La víspera del ataque se abrió una tronera en el muro del Castillo de San Cristóbal, donde se colocó un cañón a baja altura para dificultar el desembarco inglés en la playa que separaba este castillo del de San Pedro. Es posible que, como indica la tradición, se tratara del Cañón Tigre, pero es un hecho indemostrable, ya que eran numerosos los cañones que en fuego cruzado intentaban impedir el acceso inglés a la playa y al muelle, pero no comentan que fue para la defensa del  barco Español lleno de tesoros que regresaba de las colonias americanas  lleno de riquezas y que Nelson quería para si.
La Historia Oficialista  dice:
Nelson y sus hombres desembarcaron con sigilo en varios lugares de la costa tinerfeña e intentaron penetrar hacia el interior de la isla, pero al ser rechazados por sus valientes habitantes concentraron todos los esfuerzos en apoderarse del Castillo de San Cristóbal por creer que, si lo conseguían conquistar, sus planes de apoderarse de la Isla  tendrían éxito, sin embargo, los defensores del castillo opusieron una feroz resistencia  sabiéndose contar con hombres menos preparados para la guerra pero muy concienciados en la defensa de su territorio, resultando  al final gloriosos vencedores.
En esa victoria tinerfeña sobre la potente Armada inglesa, jugó un papel fundamental el famoso cañón de a 16 llamado “El Tigre”, del que, según la tradición, salió la bala que impactó en Nelson y le mutiló para siempre su brazo derecho, con los cual sus hombres, al verle maltrecho, quedaron desconcertados y hondeando una bandera blanca se dieron por vencidos, negociando a continuación las condiciones de la derrota, mediante las cuales Nelson, a cambio de salvar su vida y la de sus hombres, se comprometió a no atacar más a las Islas Canarias y además, a llevar un documento a Cádiz para dar cuenta a las autoridades españolas del compromiso que había adquirido. Una vez firmado ese documento, los militares y los tinerfeños vencedores ayudaron a embarcar a los prisioneros ingleses que habían logrado capturar, gustando tanto ese caballeroso gesto a Nelson que quiso corresponder regalando cierto vino y un queso al jefe español que había logrado derrotarle y evitado que el Archipiélago canario pasara a depender de la corona inglesa.
Desde entonces el cañón “Tigre”, que curiosamente fue construido en Sevilla, se convirtió en un símbolo de Tenerife, siendo conservado sobre el ya inexistente Castillo de San Cristóbal, situado en un sótano de la mencionada Plaza de España. Allí, junto a restos de murallas, el cañón “Tigre” se puede ver gratuitamente en una sala dedicada a él solo, en la cual, además, hay paneles explicativos de su leyenda y de su singular historia.
Gracias a tan importante hecho histórico, el 28 de agosto de 1803 se le concedió a Santa Cruz de Tenerife el título de “MUY LEAL, NOBLE  INVICTA VILLA, PUERTO Y PLAZA”.
Pero como siempre cada ciudad siempre tiene que tener sus héroes y sus historias y leyendas urbanas, para sentirse orgulloso de sus raíces.
Antonio Álvarez Herranz